
Aún me cuesta asimilar que no me encontraré contigo en uno de estos días y nos pondremos a hablar de Dios, de la iglesia, de Salem y de tantas otras cosas. Abogada, pastora, profeta, sierva del Señor y amiga espiritual, no se porqué te marchaste tan pronto dejando "muita saudade" en mi corazón, algún día lo entenderé. Solo sé que continuamente importantes cosas de la iglesia y de otros ambitos te traerán a mi memoria, como tambien cosas irrelevantes, entre ellas, orkut, las ensaladas agridulces y los doritos. No te quiero decir adios, sino solo hasta pronto.